El 30 de diciembre de 2020 la Alcaldía Mayor de Bogotá expidió el Decreto 345 de 2020 a través del cual adopta la actualización de su Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos (PGIRS), vale la pena recordar que este es un instrumento de planeación que contiene objetivos, metas, programas, proyectos, actividades y recursos definidos para el manejo de los residuos sólidos, el cual se ejecutará durante un período determinado, de acuerdo con un diagnóstico inicial, su proyección a futuro y un plan financiero viable que permita garantizar el mejoramiento continuo del manejo de residuos y la prestación del servicio de aseo a nivel municipal o regional.
La responsabilidad de formulación, implementación, evaluación, seguimiento, control y actualización del PGIRS se encuentra en cabeza de las entidades territoriales y de acuerdo con la Resolución 754 del 25 de noviembre de 2014 expedida por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Territorial, al inicio del período constitucional de los alcaldes municipales o distritales, debe realizarse la revisión del PGIRS, pudiendo dar lugar a su actualización, siempre que exista una justificación técnica como cambios sustanciales en las proyecciones de la población o en la generación o composición de residuos sólidos.
Aunado a lo expuesto, se debe tener en cuenta lo ordenado por el Ministerio de Ambiente en la Resolución 2184 del 26 de diciembre de 2019 en relación con el Código de Colores (verde, blanco y negro), señalando que a partir del 1 de enero de 2021 los municipios y distritos deben implementar este nuevo código en el marco de los programas de aprovechamiento de acuerdo con lo establecido en su PGIRS.
De conformidad con lo anterior, la Alcaldía Mayor de Bogotá siguiendo las directrices del Gobierno Nacional, actualizó su PGIRS indicando que los usuarios del servicio público de aseo deberán presentar sus residuos de manera separada según lo dispuesto en la Resolución 2184 de 2019, agregando que de manera progresiva se irán estableciendo mecanismos que permitan el aprovechamiento de los residuos orgánicos dispuestos en la caneca verde.
Sorprende en torno a esta actualización del PGIRS que la Alcaldía Mayor no tenga aún implementada alguna iniciativa que permita que los residuos orgánicos aprovechables se reincorporen de algún modo a la cadena productiva, inclusive en administraciones anteriores se había conseguido aprovechar el material resultante de podas y corte de césped, el que hoy día llega igualmente al patio de disposición final del relleno sanitario más grande del país, sin aprovechamiento alguno.
Igualmente, no se observa dentro de este instrumento de planeación articulación alguna con los planes de gestión ambiental de residuos de envases y empaques a cargo de los productores y distribuidores, lo que iría en contravía de lo definido en la Resolución 1407 de 2018.
Así mismo, se evidencia que se mantiene al Relleno Sanitario Doña Juana como lugar de disposición final por excelencia, concentrando esfuerzos en lo que ya es una tradición en torno a estos instrumentos de planeación, la disminución de la cantidad de residuos aprovechables que ingresen al mismo. Esperemos que los resultados de esta administración nos permitan descifrar los cambios en mente.
Con todo, queda claro que los bogotanos ya están en la obligación de separar y presentar sus residuos en tres bolsas de colores, así no se cuente con plantas, proyectos o iniciativas en marcha que permitan reincorporar a la cadena esa nueva categoría de residuos diferenciables, correspondiente a los orgánicos aprovechables.
Para conocer los documentos del PGIRS actualizado de Bogotá, puedes acceder a:
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